Tips para cocer garbanzos y lograr que queden tiernos
Los garbanzos son un ingrediente básico en muchas cocinas alrededor del mundo debido a su versatilidad y valor nutricional.
Son una gran fuente de proteínas, fibra, vitaminas y minerales, lo que los convierte en un alimento saludable y delicioso. Sin embargo, lograr que los garbanzos queden tiernos y masticables puede ser un desafío para muchos cocineros.
En este artículo, te daremos algunos consejos y trucos para que puedas cocinar garbanzos de manera que queden perfectamente cocidos y listos para agregar a tus recetas favoritas. ¡No te lo puedes perder!
Remojo de los garbanzos
El primer paso para obtener garbanzos tiernos es remojarlos adecuadamente. El remojo ayuda a ablandar los garbanzos, reduce el tiempo de cocción y también ayuda a eliminar parte de su contenido de ácido fítico, lo que facilita la digestión.
Para remojarlos, se recomienda colocarlos en un recipiente grande y cubrirlos con agua tibia-caliente. Es importante usar agua filtrada o mineral para asegurarse de que no absorban sabores extraños durante el remojo. La proporción ideal es de tres partes de agua por una parte de garbanzos.
El tiempo de remojo recomendado es de 12 horas, aunque algunos cocineros prefieren dejarlos en remojo durante la noche o incluso durante 24 horas. Durante este período de tiempo, los garbanzos absorben agua y se hinchan, lo que permitirá que se cocinen de manera uniforme y más rápidamente.
Cocción en olla convencional
Una vez que los garbanzos están remojados, es hora de cocinarlos. En una olla convencional, colocalos remojados junto con el agua suficiente para cubrirlos completamente. La proporción ideal es de tres partes de agua por una parte de garbanzos.
Enciende el fuego a alto y lleva el agua a ebullición. Una vez que el agua comience a hervir, reduce el fuego a medio-bajo y deja que se cocinen a fuego lento durante 2-3 horas. Durante la cocción, es importante mantener un ojo abierto y agregar más agua si es necesario para asegurarse de que siempre estén sumergidos.
Durante la cocción, los garbanzos liberarán espuma que debes remover con una cuchara o espumadera. Esta espuma contiene impurezas y amargor, así que asegúrate de retirarla para que sean más suaves y sabrosos.
A medida que se cocinan, irán ablandándose y volviéndose tiernos. Para verificar si están listos, toma un garbanzo y pellizca ligeramente. Debería ser suave pero aún mantener su forma. Una vez que estén completamente cocidos, retira la olla del fuego y escurre el agua.
Cocción sin remojo
Si necesitas cocinar garbanzos sin remojo previo, ¡no te preocupes! Aunque el remojo ayuda a ablandarlos y reduce el tiempo de cocción, es posible cocinarlos directamente sin ningún problema.
Para cocinar sin remojo, simplemente agrega los garbanzos secos a una olla con agua hirviendo. Aquí hay un truco para acelerar el ablandamiento: añade una cucharadita de bicarbonato de sodio por cada litro de agua. El bicarbonato de sodio ayuda a ablandarlos y reduce el tiempo de cocción.
Después de agregar el bicarbonato de sodio, reduce el fuego a medio-bajo y cocina los garbanzos durante 2-3 horas. Durante la cocción, asegúrate de que estén siempre sumergidos en agua. Como con la cocción con remojo, también debes retirar cualquier espuma que se forme en la superficie.
Una vez que los garbanzos estén tiernos y masticables, retira la olla del fuego y escurre el agua. Ahora están listos para ser utilizados en tus recetas favoritas.
Cocción de garbanzos congelados
Cocinar garbanzos congelados es una forma rápida y conveniente de disfrutar de este alimento saludable. Lo mejor de todo es que no es necesario descongelarlos previamente, puedes agregarlos directamente a la receta que estés preparando.
La cocción de los garbanzos congelados es similar a la cocción de los garbanzos remojados, pero ten en cuenta que pueden requerir un poco más de tiempo de cocción. Asegúrate de seguir las indicaciones de la receta que estés utilizando y ajusta el tiempo de cocción en consecuencia.
Es importante mencionar que la calidad y textura de los garbanzos congelados pueden variar según la marca y el proceso de congelación. Algunos pueden requerir una cocción más larga para lograr la misma textura que los garbanzos remojados. Por lo tanto, es recomendable probar un garbanzo después de la cocción y ajustar el tiempo si es necesario.
Cocción en olla a presión
La olla a presión es una gran herramienta para cocer los garbanzos de manera más rápida. Si tienes prisa o simplemente quieres ahorrar tiempo, la olla a presión es tu mejor opción.
Para cocinar garbanzos en una olla a presión, comienza por remojarlos durante 8-12 horas. Después del remojo, escúrrelos y colócalos en la olla a presión junto con agua suficiente para cubrirlos completamente. La proporción de agua es la misma que en la cocción en olla convencional: tres partes de agua por una parte de garbanzos.
Cierra la tapa de la olla a presión y colócala en la estufa a fuego medio-alto. Una vez que la olla alcance la presión adecuada (generalmente indicado por una válvula que levanta), reduce el fuego a bajo y cocina los garbanzos durante 20-45 minutos, dependiendo de la textura deseada.
Al finalizar el tiempo de cocción, retira la olla del fuego y deja que la presión se libere naturalmente antes de abrir la tapa. Una vez abierta la olla, verifica la textura de los garbanzos. Si aún no están lo suficientemente tiernos, puedes cerrar la olla nuevamente y cocinarlos por unos minutos más.
Cocción en Thermomix
Si eres afortunado de tener una Thermomix en tu cocina, cocinar garbanzos será aún más fácil y conveniente. La Thermomix es un robot de cocina que combina varias funciones en un solo aparato, incluyendo la cocción de alimentos.
Para cocinar garbanzos en Thermomix, comienza por remojarlos durante 8-12 horas. Después del remojo, escúrrelos y colócalos en el recipiente de la Thermomix. Agrega agua suficiente para cubrir los garbanzos y enciende la Thermomix a 100 ºC.
Programa la Thermomix para que cocine durante 1 hora y 42 minutos a 2 horas, dependiendo de la textura deseada. Durante el proceso de cocción, la Thermomix calentará el agua y cocinará los garbanzos hasta que estén tiernos y masticables.
Al finalizar el tiempo de cocción, retira los garbanzos de la Thermomix y escúrrelos antes de utilizarlos en tu receta favorita.
Conclusión
Cocinar garbanzos para que queden tiernos y masticables no tiene por qué ser complicado. Siguiendo estos consejos y trucos, podrás cocinarlos en poco tiempo.
Recuerda que el remojo es importante, reducir el tiempo de cocción y facilitar la digestión. Si no tienes tiempo para remojarlos, puedes optar por la cocción directa sin remojo o utilizarlos congelados.
La olla a presión y la Thermomix son herramientas útiles si necesitas cocinar los garbanzos rápidamente. Ambas opciones te permitirán obtener garbanzos tiernos y masticables en mucho menos tiempo que la cocción convencional.
Ahora que tienes todos estos consejos, ¿qué esperas para cocinar tus propios garbanzos tiernos y disfrutar de sus numerosos beneficios para la salud? ¡Manos a la obra y a cocinar!
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